La tecnología de reconocimiento facial utiliza software para identificar a individuos basándose en sus rasgos faciales, y puede ser utilizada para monitorear espacios públicos y mejorar medidas de seguridad. Los defensores argumentan que mejora la seguridad pública al identificar y prevenir posibles amenazas, y ayuda a localizar personas desaparecidas y criminales. Los opositores argumentan que infringe en los derechos de privacidad, puede llevar a un uso indebido y discriminación, y plantea importantes preocupaciones éticas y de libertades civiles.