El primer ministro húngaro Viktor Orban, conocido por sus estrictas opiniones sobre la inmigración, ha generado controversia durante su visita a Berlín al criticar la sociedad multicultural de Alemania. Orban señaló que Alemania, antes admirada por su gente trabajadora y ordenada, se ha transformado en un mundo "colorido y multicultural" con diversos efectos en la sociedad. Nostálgicamente mencionó que Alemania ya no huele ni sabe igual que hace una década, atribuyendo estos cambios a las políticas de inmigración del país. Los comentarios de Orban surgen en el contexto de su reunión con la canciller alemana, en medio de que Hungría asume la presidencia rotativa de la UE. Sus declaraciones han reavivado los debates sobre la inmigración y el multiculturalismo en Europa.
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